Ruta por la fortificaciones de Ceuta el 1 de marzo.

La asociación virtual de senderismo de Ceuta celebrará una marcha a pie por la ruta de las fortificaciones para reivindicar el valor cultural y natural de las fortificaciones de la ciudad y su entorno.

La asociación AVISCE espera media millar de participantes.

El istmo está amurallado en las zonas norte y sur, y limitado por dos fosos, el de la Almina –seco- y el navegable de las Murallas Reales. Serán estas últimas, construidas por portugueses y españoles, las que ofrezcan algunas de las más bellas estampas nocturnas de la ciudad.

Ya en lapenínsula de La Almina se encuentra el turista con el majestuoso conjunto de fortificaciones del Recinto del Monte Hacho. Levantado entre los siglos XVII y XIX, alberga los fortines del Sachal y de la Palmera, y las murallas de la Tordecilla, el Castillo de Desnarigado, la Atalaya del Palmar, la Batería de Punta Almina y las murallas del Litoral Norte.

El Castillo de Desnarigado, fuerte con antecedentes de los siglos X y XVI pero profundamente intervenido en el XIX, se ha convertido en Museo Militar y alberga en la actualidad colecciones de objetos relativos a ese pasado de Ceuta. Un pasado del que también dan buena cuenta los museos de la Legión y del Cuerpo de Regulares.

En el extremo opuesto de la ciudad, en el Campo exterior, hallamos también las huellas de la beligerancia y el espíritu defensivo de los pueblos que han habitado Ceuta. El Conjunto de fortines y torres neomedievales de la Sierra Bullones, los restos de las torres medievales de Alquería y las murallas Merinidas son otros ejemplos de arquitectura militar.

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